viernes, 9 de noviembre de 2007

El parto!




Para hacer honor a la verdad, les confieso que al menos en mi caso, el parto natural/vaginal/sin anestesia duele... muuuuucho... duele tanto como @$%*#! (perdón por mi "francés"). Lo que si es cierto, como muchas madres me habían contado, es que en el momento del parto, los dolores fueron parte del camino para que mi hijo pasara "de mi vientre a mis brazos", excelente frase que aprendí y memoricé del curso prenatal que Andreas y yo habíamos tomado en Embarazarte.




Apaguen sus celulares, que empieza la película:




El parto fue natural y sin anestesia, en la sala llamada de parto humanizado en la Policlínica Cristobal Rojas, con la capitanía de la Dra. Migdalia Escalona, el apoyo de Andreas y mis padres y el apoyo técnico de la enfermera Claudia y el residente William.




La fase 1 de dilatación empezó en casa a las 3am del lunes 5. Esa mañana desayuné y almorcé ligero y estuvimos mis padres, Andreas y yo en casa, monitorenado con la doctora por teléfono y cronometrando las contracciones. A las 5pm nos fuimos a la clínica, a las 6:30 - 7pm ya tenía 2-3 de dilatación y casi inmediatamente después de que la doctora hiciera el tacto, rompí fuentes. Esta fase la sobrellevé en distintas posiciones antálgicas (caminando, de pie apoyada en Andreas o en algún soporte de pared, rebotando o girando sentada en la pelota) y algunos momentos de descanso acostada. Está fase consistió en dolores de vientre, como los premenstruales, y contracciones, las cuales no fueron dolorosas en ningún momento y no las sentí sino hasta bien avanzada la dilatación. Eso si, a medida que avanzaba la dilatación las contracciones se hicieron más frecuentes hasta el punto de hacerse prácticamente contínuas.




La fase 2 expulsiva (salida de Sebastian) fue en agua, empezó a las 12:15am del martes 6 y terminó con la salida de Sebastian a las 12:55am, en yacuzzi, con la doctora en cuclillas frente a mi fuera del yacuzzi, con Andreas sentado soportándome desde atrás y mi madre al lado fuera del yacuzzi, su canto musitado en una de las partes más intensas fue de oro para darme más fuerza,concentración y calma.




La fase 3, el alumbramiento (salida de la placenta) fue también en el agua, casi instantáneamente después de que saliera Sebastian. Mientras tanto, mis padres observaron y acompañaron la revisión y las mediciones que la neonatólogo hizo.




La fase 4 ;) (cosida de la episiotomía y primera desinfección) fue en la cama obstétrica. Mientras tanto Andreas y yo disfrutamos de recibir a nuestro hijo en mi regazo, cruzando las primeras miradas. Este primer contacto fue la clave para soportar los trabajos finales de costura y retirada de restos de placenta.




La fase 5 :D fue pasar la primera noche juntos (tocándonos y viéndonos!) Andreas, Sebastian y yo, en la cama matrimonial de la habitación 7 de la clínica, dándole el primer pecho a Sebastian, recuperándome con un juguito, mucha agua y un sandwich de queso que devoré!

2 comentarios:

Ivelisse Tovar dijo...

Hola Lorena,
Que sabroso leer tu relato... poner experiencias en común. Te invito a visitar mi blog, yo también escribí la descripción de lo que fue mi parto. Entra en ivelissetovar.blogspot.com.
Vuelvo a tu historia. Es cierto, duele, pero todo pasa tan rápido, parece tan increible que ese pequeño ser haya salido de ti... para mi fue una experiencia bellísima e indescriptible con palabras, aunque ciertamente, recuerdo momentos incómodos, hoy pienso que valió la pena... estoy segura de que tu también.
Supongo que ahora empezará la etapa de compartir historias durante el crecimiento y los cumpleaños de los bebitos, que se llevan un mes.
Un beso y mil felicidades para ti, Andreas y Sebastián, de parte de Daniel, Jacobo e Ivelisse :)

Anyel Maternity dijo...

Lorenita que sorpresa encontra este blog de tu autoria, que maravilla, un abrazo gigante.
Aura Arelis Pereira
Facilitadora de Nacimiento