sábado, 29 de diciembre de 2007
A dormir boca abajo!
jueves, 13 de diciembre de 2007
Lactancia materna o biberón? A libre demanda o por horario?
En nuestro caso hemos elegido lactancia materna exclusiva, hasta los seis meses o hasta que el pediatra o la vuelta al trabajo indiquen otra cosa. Los pros: La leche materna es la alimentación perfecta, natural e ideal para mi bebé; nos conecta de manera insustituible a el y a mi; es económica, accesible (especialmente en estos tiempos de escacez de leche en Venezuela); y no tengo que lavar biberones ni perder tiempo en prepararlos. Los contras? Me mantiene alejada de alimentos que me encantan como la Nutella y las frutas cítricas como el limón y la piña. Otro contra es que si toca alimentarlo y estamos en público, me incomoda un poco tener que mostrar parte de mi cuerpo bien sea la barriga porque me levanta la blusa o el pecho porque me desabotono la camisa. Otras cosas que he escuchado pero no he comprobado científicamente es que ayuda a adelgazar, contribuye a que la recuperación de la madre sea más rápida, y afecta la forma de los senos
En cuanto a la frecuencia, intenté los primeros días darle pecho a libre demanda, es decir, cada vez que yo entendiera que el lo pedía, pero la verdad resultó bastante desordenado y estoy segura que algunas veces le di pecho cuando en realidad el deseaba otra cosa. Ahora estoy ensayando establecer un horario flexible de aproximadamente cada 3 horas. Cuando estoy atenta y despierta, nos va bastante bien. Así yo también me siento más tranquila y confiada que el está comiendo bien y que mis senos están produciendo leche en abundancia.
Así es como tengo resuelto el tema de la limentación de Sebastian al menos por los primeros meses. Lo que sigue siendo un tema es el sueño, de eso hablaremos más adelante.
miércoles, 12 de diciembre de 2007
No tiene precio!
Luego de un mes durante el cual cuatro horas seguidas de sueño empezaron a considerarse como en Venezuela son ahora la leche, los huevos, el pollo o la carne; es decir, un bien escasísimo, valiosísimo y añoradísimo!...
Luego de vivir en carne propia el tan escuchado y temido "recibirás las siete de la noche empiyamada, despeinada y habiendo saltado al menos una de las dos comidas fuertes del día"...
Luego de sentir que estoy a punto de perder la razón al escuchar su llanto durante 1 hora (literalmente)...
Luego de haber hecho toda clase de intentos por adivinar la razón de su llanto y apaciguarlo, bien sea cargándolo, meciéndolo, arrullándolo, dándole pecho, o todas las anteriores...
Luego de todo esto y lo que se me escapa ahora, repentinamente y sin esperarlo, viene Sebastian y me paga el salario de este mes, con todo y bono de fín de año: Me sonríe!
Lo había visto sonreirme dos veces antes, pero no quería hacerme falsas ilusiones y lo atribuí al acto reflejo con que nacen y a la casualidad, pero en este video no quedan dudas, mi hijo me regaló una sonrisa, y eso no tiene precio!